Roma, Milán, islas divinas, lagos, aproximadamente 7 mil kilómetros de costa, entre muchos otros lugares, el panorama italiano es tan diverso que no alcanzaría el tiempo para describirlo.
Italia, por lo regular es uno de los lugares más frecuentados del mundo cuando de vacacionar se trata. Más de 45 millones de turistas la visitan cada año y aquí te traemos 12 motivos que hacen de Italia, de norte a sur, un encantador lugar para tomarse ese merecido descanso.
- Lago de Como, Lombardía
El Lago di Como descansa al pie de los montes de los Alpes. Quien pase sus festividades aquí podrá disfrutar de la hermosura italiana en todos los sentidos.
Sus pequeños pueblos con casas de anaranjadas y marfil se sujetan a las vertientes de las serranías más bajas, sus majestuosas villas, sus jardines extremadamente exuberantes, su riqueza cultural, todo logrará acaparar la atención de aquellos que saben apreciar los lugares auténticamente bellos.
- Langhe, Piamonte
Las ventajas más importantes del paisaje de las Langhe, en la región del Piamonte, son sus colinas y su buen vino.
Allí los pueblos llenos de tradición se levantan en las cimas de las colinas. Al norte crecen las castañas y las avellanas y al nordeste del río Belbo se cultivan las uvas de populares vinos como el Barolo.
- Cinque Terre, Liguria
Este lugar es un área protegida como parque nacional y es además Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Los lugareños hacen todo lo posible por conservar el encanto original de esta vistosa costa de las Cinque Terre. Poco más o menos de doce kilómetros de la Riviera italiana, cinco pueblos (de ahí su nombre) conciertan este notorio territorio vacacional.
Los turistas que aman bañarse en el mar podrían sentirse algo decepcionados porque hay solamente una playa pequeña en Monterosso al Mare, pero los viajeros y los trotamundos de un día admiran los pintorescos pueblos costaneros.
- Termas de Saturnia, Toscana
El pequeño secreto de Italia son las fuentes termales de Saturnia y el poder vislumbrar de un paisaje excelente: piscinas humeantes en cascadas naturales, un vetusto molino, y una vista de las alturas de la Maremma.
Al sur de la Toscana se encuentran ubicadas Las «Cascate del Mulino» con su agua turquesa a 37,5 grados, todo el año.
- Jardín de Ninfa, Lacio
El Jardín de Ninfa, que se encuentra al sur de Roma, es un hermoso jardín erigido sobre las ruinas antiguas de la ciudad homónima y es uno de los más lindos del mundo.
Rosas, magnolias, cerezos en flor y lirios a lo largo de sus ríos y arroyos prometen un paseo de ensueño.
- La Maddalena, Cerdeña
Son 62 las islas que conforman La Maddalena, frente a la costa de Cerdeña, un conjunto de islas con litorales de fantástica hermosura. Los turistas alaban sus aguas turquesas y cristalinas de las que emergen rocas de granito, entre las que se pueden ver estrellas de mar y anémonas al bucear.
También puedes llegarte en barco al archipiélago, desde Palau, en Cerdeña. Hay alrededor de 300 ensenadas donde seguro encontrarás un espacio para recrearte tranquilamente al sol y disfrutar de la magia de la naturaleza.
- Costa de Amalfi, Campania
Esta bella Costa de Amalfi nutre los deseos y las ensoñaciones, en especial por los clásicos del cine como «Bajo el sol de la Toscana» y «Sólo tú».
Este lugar está calificado como el lugar más bello de la zona costera del Golfo de Salerno, donde se siembran limones y se fabrica buen vino. La mejor manera de sondear la costa es por la vía costera Amalfitana, y se debe tener mucho cuidado al transitar por estos pasajes vertiginosamente altos.
- Gruta Azul, Campania
La Gruta Azul es un territorio mágico ubicado en la costa nordeste de la isla de Capri. La única manera de entrar a la cueva es mediante una pequeña embarcación y por una brecha de roca de metro y medio de altura.
La luz del día ingresa a la cueva a través del mar, lo que le otorga un místico matiz azul.
- Costa degli Dei y Tropea, Calabria
Conocida como La «Costa de los Dioses», ésta se encuentra en la franja costera al suroeste italiano, y cuenta con numerosas playas donde el visitante puede bañarse tranquilamente.
La más popular es Tropea, elevada en unos acantilados de 40 metros de altura que dominan el mar Tirreno. En un día soleado puede verse desde allí hasta las Islas Lípares.
- Islas Lípares, Sicilia
Estas islas volcánicas son también Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y además son conocidas como Islas Eolias.
Hay siete de ellas habitadas, como Salina, Lipari y Stromboli, donde se encuentra el único volcán permanentemente activo de Europa.
- Riserva della Zingaro, Sicilia
Esta reserva natural al noreste siciliano es la primera de la isla. Con aproximadamente siete kilómetros de costa se turnan bahías de arenas con barrancos de piedra caliza.
El recorrido del parque se puede hacer en dos horas entre pequeñísimas palmeras y olivos a lo lardo de toda la costa.
- Scala dei Turchi, Sicilia
Al sur de la isla y cerca de Realmonte se alza un monumento hecho de piedra caliza, establecido por los antojos de la naturaleza.
La peculiar roca se erige blanca y brillante entre pequeñas olas y se abre paso ante el azul radiante del mar, casi simulando un iceberg.
